El desgraciau no sabe muy bien qué es eso del kebab, ni si la India queda cerca de la China, ni si los rollitos de primavera se acompañan con tinto y gas, ni si en las pelis de "bolibú" se baila el pasodoble o si en los bares beben cubalibres de tónica y Bombay... El desgraciau tan solo quiere liarla haciendo el hindú.
Además hacer el hindú es saludable.